miércoles, septiembre 13

Las cosas pasan

Muchos os estaréis preguntando acerca de mi silencio las últimas dos semanas. La verdad es que como una premonición, mi último artículo hablaba de la ruptura de un compromiso. El día después de publicarlo rompí el mío.
Tan triste como es me resulta muy complicado hacerlo público. Pero debo hacerlo por dos razones. En primer lugar me gustaría decir que seguimos juntos y que toda la presión que se ha puesto sobre nosotros para romper el compromiso ha convertido nuestro amor en algo mucho más fuerte —si eso era del todo posible.

Además, y sobre todo, me gustaría dar las gracias a mi familia y a mis amigos, quienes han estado a mi lado estos días. Me han llamado más que nunca, no me han dejado un minuto sola, me han sacado de casa, me han dicho a cada minuto que hiciese lo que hiciese estarían a mi lado. Es una pena que a veces estas cosas malas tengan que ocurrir para que nos demos cuenta de lo que tenemos.

Sin vosotros me seguiría sintiendo miserable. Estoy sinceramente agradecida de teneros. Puedo gritar a todo pulmón que tengo los mejores amigos y la mejor familia del mundo.

Gracias.

viernes, septiembre 1

Con este anillo te desposo (III)

Read in English
Te imaginas recibir un anillo de compromiso de forma un tanto prematura? Podría pasar. No es nada raro que una pareja rompa con su compromiso antes de la boda. He conocido unos cuantos casos. ¿Podéis pensar en ello? debe de ser bastante duro.

La pregunta que a menudo suscita este doloroso hecho es si la mujer debería devolver el anillo de compromiso. La respuesta es que sí; de hecho, las mujeres tradicionalmente rechazan el compromiso devolviendo o rechazando la joya en cuestión.

Es cierto que hay una norma no escrita por la que los regalos no han de ser devueltos. Pues bien, el anillo de compromiso es la excepción que confirma la regla, ya que sólo es un regalo condicional. Preguntarse quién tiene la culpa o quién rompió es irrelevante. El anillo sólo será propiedad de la mujer en el momento en el que se produzca el matrimonio.

A la mujer que se quede con el anillo de compromiso pero que no se case se le podría considerar deshonesta. En algunos países el hombre podría incluso recurrir a la ley para recuperar su anillo. Pero, ¿qué pasa si es él quien rompe? ¿Querrías devolver el anillo? ¿Querrías quedártelo? Puedo encontrar muchas razones por las que justificaría el no devolver el anillo.

Y vosotros, ¿Qué pensáis?